En caso de que únicamente sea necesario eliminar el depósito de grasa subcutánea de la mama estaremos hablando de pseudoginecomastia y la técnica utilizada será la lipoescultura. En cambio, si el paciente presenta una ginecomastia verdadera por aumento del volumen de las glándulas mamarias el tratamiento consistirá en la extirpación de la glándula a través de un pequeño corte en la areola.
Lo más habitual es que se realice una combinación de ambas técnicas. No suele ser necesario resecar el exceso de pielpues esta tiene gran capacidad de retracción salvo, en los casos que presentan gran flacidez por grandes pérdidas de peso, en cuyo caso tendremos que eliminar la piel sobrante para que ésta se ajuste adecuadamente al nuevo contorno de la mama. La anestesia puede ser local y sedación o general, y de forma ambulante o con 24 horas de internación.
En los casos en los que la ginecomastia se deba a causas como el sobrepeso, la obesidad o el consumo de bebidas alcohólicas, el doctor Arquero recomienda complementar la operación con el abordaje del problema original ya que, de lo contrario, la ginecomastia podría volver a aparecer al cabo del tiempo. En el caso de los pacientes adolescentes, en muchas ocasiones este cuadro médico revierte por sí mismo y no es necesario practicar la cirugía. El doctor Arquero y su equipo de expertos analizarán cada caso particular tanto desde el enfoque profesional como desde el humano para ofrecer a sus pacientes la atención personalizada y exclusiva que merecen.
ADONIS EN EL SIGLO XXI
Según las cifras que maneja SECPRE (Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética), entre el 40 y el 60% de hombres padece esta afección que, como adelantamos al inicio, más allá de ser un problema físico más o menos visible, a menudo trae consigo repercusiones emocionales como complejos o inseguridades. El conflicto surge cuando el afectado no es capaz de poner solución a su malestar y este empieza a mermar su autoestima y a repercutir en su desempeño social. Muchos hombres sienten vergüenza ante la idea de que su pecho pueda asemejarse más al de una mujer que al de un varón y dejan de practicar un determinado deporte, ir a la playa o a la piscina pública o usar una vestimenta concreta.
Una sociedad concienciada con la idea de que los hombres se preocupan por su aspecto físico tanto como las mujeres ayudará a estos a vencer el pudor de acudir a la consulta para someterse a una intervención rápida y sencilla que mejorará su calidad de vida y bienestar personal. Y es que, para el hombre actual sentirse bien por dentro y por fuera es una de las claves para vivir una existencia plena y feliz. El pecho es una parte de su anatomía que juega un papel fundamental a la hora de definir tanto su autoimagen como la imagen que proyecta en los demás.
Según la encuesta “La realidad de la cirugía estética en España 2017-2018”, elaborada por SECPRE (Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética), el 16,6% de los hombres españoles se somete a cirugías estéticas, que dista mucho del 4,4% según los datos obtenidos en 2014. Desde la Clínica Doctor Arquero creemos que, en las próximas ediciones, el porcentaje seguirá aumentando ya que las intervenciones estéticas en hombres son un fenómeno creciente que ha venido para quedarse.
¿Acaso no tienen los hombres de hoy en día derecho a soñar con los pectorales perfectos del Jasón o el Adonis de Thorvaldsen? Aspirar a esta perfección escultórica quizá sea volar demasiado alto sin embargo obtener la figura deseada será un objetivo mucho más alcanzable para los hombres a medida que la sociedad termine de interiorizar la preocupación de estos por su propia belleza.