La protección solar es esencial para cuidar nuestra piel de los efectos dañinos de la radiación solar, prevenir el envejecimiento prematuro y reducir el riesgo de cáncer de piel. En este artículo, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre la protección solar, incluidos los tipos de radiación, los niveles de protección y cómo elegir el protector solar adecuado para tu tipo de piel.
¿Qué son las cremas de protección solar?
Tipos de radiación
- Radiación UVB: Afecta la epidermis y es responsable de las quemaduras solares, alergias y cáncer de piel.
- Radiación UVA: Penetra en la dermis y causa manchas, fotoenvejecimiento prematuro y cáncer de piel.
- Radiación IR-A: Radiación infrarroja que acelera la aparición de flacidez.
- Radiación HEVL: Luz visible que penetra profundamente y acelera la aparición de manchas y envejecimiento.
Índices de nivel de protección
FPS (Factor de Protección Solar): Indica el nivel de protección contra la radiación UVB.
PPD (Persistent Pigment Darkening) o PA+: Indica el nivel de protección frente a las radiaciones UVA.
Lambda crítica o λc 370nm: Protección de amplio espectro, protege tanto de la radiación UVB como de la UVA.
Filtros físicos, químicos y biológicos
Filtros físicos: Actúan como espejo, reflejando la luz solar. Indicados para pieles sensibles y reactivas.
Filtros químicos: Absorben la radiación solar y la transforman en energía térmica. Son de textura ligera, pero pueden causar reacciones alérgicas e irritaciones.
Filtros biológicos: Son agentes antioxidantes que inhiben la formación de radicales libres y refuerzan el sistema inmune de la piel.
¿Cuál es el protector más apropiado para mi tipo de piel?
Identifica tu fototipo de piel y elige el protector solar adecuado según tu edad, tipo de piel y actividad al sol.
Consejos de aplicación
- Elige el FPS adecuado para tu fototipo de piel, edad y tipo de piel.
- Aplica la crema al menos 20 minutos antes de tomar el sol.
- Evita la exposición en las horas centrales del día (12-17 horas) y utiliza gorros, sombreros y sombrillas.
- Bebe mucha agua y reaplica el protector cada dos horas o después de cada baño.
- Busca protectores solares con protección UVA, UVB y homologación dermatológica.
Siguiendo estas pautas, podrás disfrutar del sol de manera segura y proteger tu piel de los efectos nocivos de la radiación solar.